Dirección: España 1024, Beccar.
Horarios de Misa (marzo a diciembre):
- Sábado: 19 h (con niños)
- Domingo: 11 h
Actividades
Bautismos y casamientos
En la capilla se celebran los sacramentos del bautismo y matrimonio.
Para anotarse para cualquiera de los dos sacramentos hay que comunicarse con la secretaría parroquial de la Catedral.
Catequesis
En la capilla realizamos la catequesis bajo la modalidad de la catequesis del Buen Pastor. Los grupos que hay son:
- Grupo Chiquititos (3 a 6 años) Iniciación a la catequesis, centrada en la figura de Jesús, Buen Pastor.
- Grupo Primera Comunión: Para todos aquellos/as que quieren prepararse para recibir el sacramento.
- Grupo de Perseverancia: Para los chicos y chicas que ya recibieron la primera comunión y quieren seguir profundizando en Jesús.
- Retiros para chicos. Durante el año se realizan dos pequeños retiros para chicos/as de 6 a 12 años. Uno se realiza en Cuaresma y el otro en Adviento.
- Semana Santa para niños: Durante la semana santa realizamos celebraciones sencillas con el fin de llevar el misterio pascual a los chicos para que puedan entenderlo e ir profundizando en él.
Rezo del Rosario
Los primeros martes de cada mes se realiza un rosario iluminado.
Historia de la Capilla Stella Maris
El Bajo de San Isidro era una zona inundable y recién a fines del siglo XIX se instalaron allí algunos pobladores con casas sobre pilotes, como las del Delta.
La primera misa que se registra fue celebrada el 12 de marzo de 1922 por Mons. Francisco Alberti, antiguo párroco de San Isidro que había iniciado la construcción de la actual Catedral y que en ese momento era Obispo de La Plata, diócesis que abarcaba toda la Provincia. Entonces vivían en el Bajo sólo 14 familias, conocidas como “Las 14 provincias”.
Ese día se celebró el tercer centenario de la canonización de San Isidro Labrador. La procesión con la imagen del Santo concluyó junto a la costa del Río porque la gente no cabía en el templo y se celebró misa en una improvisada ermita. Después se hicieron festejos populares durante tres días, con kioscos, rifas y pasatiempos, animados por una gran banda de música.
Luego el barrio se fue poblando lentamente y el párroco, Mons. Pedro L. Menini, visitaba con frecuencia las casas. En octubre de 1960 se realizó la “Gran Misión de Buenos Aires”. La sede provisoria fue un astillero en desuso ubicado en Estanislao Díaz 918, que se llamó Centro Misional “El Galpón”.
Se vivió un mes intensamente dedicado a la evangelización. El sacerdote fue un español simpático y afectuoso llamado Antonio Vergara, que dejó un deseo enorme de continuar lo que había comenzado y les dijo: “Aquí deben tener su propia Capilla”. Pero nadie asumió esta tarea.
La idea renació el 25 de agosto de 1964 cuando un grupo de vecinos se reunió en la casa de la familia Toledo, ubicada en la calle Chile y Gaboto. Pensaron que se podría conseguir el terreno que hoy ocupa el Primario del colegio San Juan el Precursor. Esto no fue posible, pero otros vecinos se sumaron y armaron una Comisión.
Se comenzó con catequesis en la escuela N° 26, una vecina creó un taller de costura donde se arreglaba ropa para los más necesitados del barrio y la Comisión siguió con su tarea evangelizadora, al mismo tiempo que crecía espiritualmente profundizando la Palabra de Dios.
A comienzos de 1967, gracias a una donación obtenida por Mons. Laguna, nuevo párroco, se compró la casa ubicada en España 1016, Beccar. El 17 de marzo de 1967 se hizo la primera reunión en la nueva sede, en cuyo frente colocaron una gran cruz de madera. Comenzaron las actividades: clases de cocina, reuniones de matrimonios y reformas en la parte baja para poder celebrar Misa.
Con el paso del tiempo y el crecimiento de la comunidad cada vez se notaba más la necesidad de tener un templo. Los salones no eran suficientes. En 1980, el P. Juan Martínez impulsó la construcción de una Capilla como planta alta de la casa existente. Las misioneras de manzana repartían un Boletín y pedían que la gente juntara monedas en botellas vacías de leche. Así se inició la obra. Una vez terminada, fue bendecida el 17 de agosto de 1983 por Monseñor Casaretto, que tiempo atrás había trabajado en el barrio y en ese momento ya era Obispo Coadjutor de San Isidro.
La inundaciones fueron una constante que unió al barrio ante la adversidad, aunque también se perdieron muchos bienes materiales. Entonces nació Cáritas para ayudar a los más necesitados.
En 1985, como consecuencia de las inundaciones y que subieron las napas, los salones del subsuelo quedaron inutilizables. Hubo que conseguir un nuevo lugar para la catequesis y el grupo scout. Con los PP. Estivill y Llambías se compraron dos terrenos en la calle España 860. En 1990 el P. Murall impulso la construcción de salones. A uno se le puso el nombre de Elba Ruiz, inolvidable catequista y pionera de la comunidad. Allí se reunía el primer grupo de jóvenes misioneros.
La comunidad seguía creciendo. En 1994, con el P. D’Annibale comenzaron la misa de niños, el equipo de liturgia, la pastoral de la salud, grupos de confirmación, matrimonios y bíblicos. Junto con la Capilla de la Ribera se hacían viajes a Luján y se celebraban las fiestas patronales.
Ya la capilla quedaba chica, la gente participaba en las misas desde la vereda y las celebraciones de Nochebuena y Vigilia Pascual se hacían al aire libre en un terreno prestado.
A fines de 1997 se remató un galpón ubicado en España 1024, lindero con la capilla. Hubo que vender los terrenos con los salones y conseguir otras donaciones para comprarlo. Era un viejo astillero muy venido abajo, con 400 metros cuadrados cubiertos, al que limpiaron y acondicionaron en forma elemental para celebrar allí la primera misa el 5 de abril de 1998, un Domingo de Ramos.
En los años siguientes la vieja capilla fue convertida en salones y el astillero se transformó en el templo actual, que aún sin terminar llena de orgullo a la comunidad.
A lo largo de esta historia muchos sacerdotes y laicos trabajaron con amor y empeño. Es imposible nombrarlos a todos, pero sin ellos esta Capilla con su comunidad no serían lo que son.